Por Qué la Privacidad es tu Superpoder Secreto
Publicado en: Adolescentes Privacidad
Compartir nuestras vidas en las redes sociales se ha vuelto una parte importante y comun de nuestro día a día. Mientras que hace unas décadas nos reuníamos en persona con nuestros amigos para enseñarles fotos o contarles lo que nos había pasado, hoy en día es común compartir fotos, comentarios, ideas, videos etc. en las redes sociales. El mundo funciona así ahora. Es “páctico y conveniente”. Y no es malo.
Este post no es para decirte que dejes de compartir, sino para enseñarte a hacerlo de una manera más consciente, protegiendo tu privacidad sin quedar fuera de tu círculo de amigos. Muchas veces la palabra ‘privacidad’ se ve como algo negativo, un limitante. Pero te vamos a decir algo: la privacidad no es para esconderte. Es la herramienta que te da la libertad de ser tú de verdad.
La Libertad de Ser Principiante
Piensa en esto: nadie nace siendo un experto. Antes de que un guitarrista toque un solo increíble, pasa cientos de horas desafinando en su cuarto. Antes de que un artista pinte una obra maestra, tiene cuadernos llenos de bocetos y errores.
Ese cuarto, ese cuaderno de bocetos... eso es la privacidad.
Es un espacio seguro para ser malo en algo antes de ser bueno. Es la libertad de subir un video de tu primer intento de patineta, compartirlo solo con tus dos mejores amigos y reírte de la caída, sin el miedo a la burla de 200 personas. Es poder escribir un poema, una historia o el código para tu primer videojuego sin que nadie te juzgue mientras estás aprendiendo.
La privacidad te da un “dojo” personal. Un lugar para practicar, fallar y mejorar a tu propio ritmo.
La Libertad de Dejar el Pasado Atrás
La persona que eres hoy no es la misma que serás en cinco años. Los intereses que te apasionan a los 13 pueden parecerte lejanos a los 18. Y eso es completamente normal. Se llama crecer.
Ahora, imagina que toda tu vida está en un solo perfil gigante. Tu fase de “súper fan de la banda X”, tus primeros intentos de hacer comedia, tus opiniones sobre un videojuego… todo mezclado. Cuando quieres pasar a la siguiente etapa, te ves forzado a borrar tu pasado o a vivir con él para siempre.
Separar tus espacios digitales te da la libertad de evolucionar. Puedes tener una cuenta para tus amigos del colegio, otra para tu pasión por los videojuegos con un seudónimo, y un grupo cerrado para tu clase de cerámica. Cuando esa etapa de tu vida termina, puedes simplemente dejar ese espacio atrás, sin tener que demoler todo tu historial digital. Es como guardar lo en una caja en el clóset. Sigue siendo parte de ti, pero no tiene que estar visible para cada nuevo amigo o compañero o peor, para todo el mundo.
La Libertad de Conectar de Verdad
Piensa en las conversaciones más importantes que tienes con tus amigos. ¿La vez que necesitabas un consejo, que compartiste un secreto, o que simplemente necesitaban desahogarse? Esas conversaciones no suceden en los comentarios de un post para que todos las vean.
Ahí es donde entra la privacidad. No es para alejarte de tus amigos, es para crear un “backstage” solo para ustedes. Tu feed es el escenario donde se muestra la parte divertida, pero los chats privados o los grupos pequeños son el camerino donde ocurre la amistad de verdad. Es el espacio donde puedes ser vulnerable, pedir ayuda y ofrecer apoyo sin la presión de una audiencia. La confianza se construye en estos espacios privados, no en el número de likes.
El Cómo: Construyendo tus Espacios Privados
Esto no es complicado. Ya tienes las herramientas. Se trata de usarlas con intención, como un artesano elige la herramienta correcta para cada trabajo.
Paso 1: Domina los Círculos de Confianza
No todo el contenido es para todo el mundo. El primer paso para tomar el control es decidir activamente quién ve qué.
En Instagram:
Usa la función de “Amigos Cercanos” (Close Friends). Antes de publicar una Historia, tómate un momento para pensar: “¿Esto es para todos mis seguidores o solo para mi círculo de confianza?”. Crear y mantener esta lista es uno de los actos de soberanía digital más simples y poderosos. Te da un espacio semiprivado para ser más tú, compartir chistes locales o momentos más personales, sabiendo que solo lo verá la gente que has elegido.
En Facebook:
La herramienta clave son las “Listas de Amigos”. Puedes crear listas como “Familia”, “Compañeros de Equipo” o “Amigos de la Escuela”. Cuando vayas a publicar algo, en lugar de compartirlo en “Público” o con “Amigos”, puedes seleccionar una de estas listas específicas. Es perfecto para compartir fotos de un viaje familiar solo con la familia, o un meme sobre un videojuego solo con tus amigos gamers.
Un buen consejo es revisar cuál es tu opción estándar para compartir. Muchos lo tienen configurado en “Público” o “Amigos” por defecto. Considera cambiar esta configuración a una de tus listas más restrictivas, como “Amigos Cercanos”. Así, si alguna vez olvidas filtrar, tu publicación se compartirá con un grupo pequeño por defecto, no con todo el mundo.
En otras plataformas:
Casi todas las redes tienen herramientas similares. TikTok te permite configurar videos como “Privado” (solo para ti) o “Amigos”. Snapchat se basa en la idea de enviar contenido a personas o grupos específicos. La clave es siempre la misma: antes de publicar, detente un segundo y elige activamente tu audiencia.
Y recuerda: si te equivocas o cambias de opinión, no pasa nada. La mayoría de las plataformas te permiten editar la configuración de privacidad de una publicación después de haberla compartido. Siempre puedes volver atrás y ajustar quién puede ver tu contenido.
Paso 2: Crea tus “Talleres” Personales (Cuentas “Alt”)
Tener una cuenta alternativa (un “alt”) para un hobby específico es una de las prácticas más inteligentes y liberadoras. Es tu espacio para ser un principiante sin presiones.
Crea un “Alt” para tu pasión: ¿Te encanta dibujar, jugar a un videojuego específico, o escribir? Crea una cuenta separada solo para eso. Te permite conectar con una comunidad global de gente que comparte esa misma pasión, aprender de ellos y compartir tu progreso sin mezclarlo con tu vida social principal.
Elige tu Nombre (Seudónimo): En tu cuenta de gaming o de arte, no necesitas usar tu nombre real. Un seudónimo te da una capa de protección y libertad. Te permite construir una reputación basada en tu habilidad y tu pasión, no en quién eres en la escuela.
Tu Vida Digital, Tus Reglas
Al final, de esto se trata la #SoberaniaDigital. No de que tus padres te impongan reglas, sino de que tú entiendas el poder que tienes para diseñar tu propia vida digital.
La privacidad no es un muro para aislarte. Es un conjunto de herramientas de artesano que te permiten construir los espacios que necesitas para crecer, explorar y convertirte en la persona que quieres ser, en tus propios términos.